El presente proyecto aún se encuentra abierto y en el mismo recojo piezas que han ido surgiendo a lo largo de un tiempo, a partir del desarrollo de una problemática concreta que me resulta inquietante.
A lo largo de estos meses, me he ido interesando en los aspectos de la violencia no-explícita, en la violencia que somete sin contacto físico y en las jerarquías y elementos que intervienen en la ejecución de este acto de poder.
Los modos en que se han ejecutado los métodos de control y dominio han evolucionado a lo largo del tiempo, alcanzando actualmente su modo de expresión más sutil y puede que más eficaz. Lo efímero de nuestro tiempo, los desarraigos, los temores... son varios los elementos que nos convierten en seres individuales e indefensos, aislados y controlables, sometidos desde esta agresividad carente de acto ejecutor nítidamente identificable.
Los referentes de mi trabajo los vinculo directamente con el mundo cinematográfico, relatos en los que el observador es incapaz de señalar el momento exacto el cual se traspasó la línea invisible en donde los roles son reasignados y aparecen en escena los tres personajes principales del acto violento: el controlador, el controlado y el contexto.
